domingo, 26 de diciembre de 2010

La Espiral Etapa 2 - 3 - El Cabaco-Mohedas de Granadilla-Plasencia

Día 2 -El Cabaco-Mohedas de Granadilla- Me despierto en El Cabaco,tarde a las 9,cansado por el inicio de ruta del día anterior y comienzo la subida hacia la Alberca, el paisaje ha cambiado de la dehesa al serrano con pinos y robles melojos, mas abrupto y a lo lejos se adivina la sierra de Francia. Aquí la comarcal es buena pero el arcén muy pequeño aunque los coches son respetuosos y no pasan cerca, como siempre voy pensando cuando inicio las subidas, que he metido demasiado equipaje en las alforjas,,,, A lo lejos ya he visto buitres y milanos sobrevolar los pinares.










Entro a la Alberca y veo rápido que es un sitio muy turístico todo muy colocado y como decía un escritor “aquí no huele a mierda”. Compro comidas varias, tiro las fotos precisas de las casas típicas de madera con flores, voy a la oficina de turismo.
Inicio la subida continua hacia El Portillo Y creo que no voy a poder, al llegar arriba paro a mirar las vistas de las Hurdes donde voy a bajar por las Batuecas, como fruta y ajusto frenos, voy a bajar en pocos km 600m. de desnivel, la bajada es preciosa, he puesto un móvil para que haga una foto cada 30 segundos y grabare un vídeo con esas imágenes, bajo más me desvío y entro en un recoleto vallecito con un río serrano brincando de piedra a piedra, miro el mapa y !! voila estoy en las Batuecas !! (Como siempre he querido) veo una entrada a un monasterio cerrada y me acuerdo aquí vive un grupo de monjes en retiro eremítico a la antigua usanza, Ora et Labora y conservan su intimidad celosamente, solo permiten el acceso para retiro espiritual.











Reposo un rato, mastico algo y continuo por un vergel florido hacia Las Mestas, pueblecito serrano en el fondo del valle, donde se produce y es origen un bebedizo llamado Ciripolen y otro llamado Don Picho, hay en este lugar una piscina natural fantástica y grande con un chiringuito glorioso adosado a ella en el que aparque la burra, me puse bañador y chanclas (venían en las alforjas también) y me bañe y consumí tres claras de tubo amen de medio pollo con patatas que me ocuparon de 2 a 5 de la tarde y cuando salí de allí y empecé a subir y bajar cuestas y portillos camino de La Pesga casi la casco.




Cruzo Vegas de Coria, un pueblo bonito y próspero en la ctra. de Coria, de donde sale una comarcal que se mete de lleno en Las Hurdes hacia Nuñomoral. Llego a la Pesga por una bajada final muy cómoda hasta el embalse y al cruzar el puente parada en el chiringo, pregunto por el hostal? Sonríen -algo pasa- resulta que son fiestas y el escenario esta debajo del hostal -elijo juerga o seguir al día siguiente- de manera que iré al próximo pueblo.
 Mohedas en que hay otro hostal, 15 km después, de noche ya, resulta que el otro hostal ya solo usa las camas para otra cosa que no es dormir, cansado y harto pregunto y me dicen que ya a otro pueblo o a dormir en el parque porque no hay mas hostales, dicho y hecho, hasta mañana al parque del pueblo en el corcho de los juegos de los niños.
Día 3 –Mohedas de Granadilla-Plasencia- Me levanto acordándome de mi saco, mi aislante y mi tienda de campaña, en fin otra vez. Pedaleo hasta Guijo de Granadilla, desayuno y comento con el dueño del bar que se ha oído toda la noche música bakalao, me dice que a la orilla del embalse hay 400 jipis con autobuses y caravanas, nacionales y extranjeros que llevan una semana atronando con la música? y están a 10 km. Es temprano y hace calor, inicio el camino a Oliva de Plasencia, todo subidas y bajadas, del embalse a Ventaquemada hay un cueston de bajarse, como hice, al llegar a la dehesa de Ventaquemada unos alcornoques centenarios y enormes salpican la planicie, pequeñas lagunas dan hospedaje a garzas y cigüeñas amen del ganado claro.






Me cruzo con la Calzada de la Plata, prosigo mi camino hasta Oliva, allí los bares están cerrados y una señora amable me ofrece sombra y cola para beber, hasta que no me bebo 3 vasos no me deja marchar, entre ella y su vecino sumaban 150 años por lo menos. Salgo dirección Plasencia entro en la nacional 630 y empiezo a apreciar las comarcales que dejo atrás.
En Plasencia subo a la zona antigua y hago la visitas de las dos catedrales, el barrio viejo y la plaza con sus terracitas que uso en el acto con dos tubos de clara y una pancetita para recuperar lo gastado, en ese momento me llaman de mi casa para decirme que mi tía ha muerto y suspendo todo y organizo la vuelta, mientras espero el autobús descubro que con agua del rio han puesto una piscina natural y me doy un baño glorioso, se llama la isla del rio.
Me faltaba ese dia llegar a Monfrague y al siguiente a Caceres y me sobraba tiempo para hacer turismo. Ya lo hare.